"Con la sagrada unción de los enfermos y con la oración de los presbíteros, toda la Iglesia entera encomienda a los enfermos al Señor sufriente y glorificado para que los alivie y los salve. Incluso los anima a unirse libremente a la pasión y muerte de Cristo; y contribuir, así, al bien del Pueblo de Dios" (1).
Para recibir este sacramento debe solicitarlo al Párroco. No existe edad mínima para recibirlo, con tal que vaya a ser operado de importancia o padezca una grave enfermedad. Habitualmente se recibe una vez al año a partir de 60, ya que la misma edad conlleva alguna enfermedad.
(1) CEC, n.1499